31 diciembre 2013

Aterrizaje sin tren en el sur

Se salvó este Navajo comercial
 Piper PA-31 Navajo, CC-CMM, c/n 31-315 (foto, Radio Las Nieves)
A pesar de que por su mala redacción yo lo consideraría un "intento deliberado por desinformar", el sitio de la Radio Las Nieves reportó el 30 de diciembre que el Piper PA-31 CC-CMM tuvo un descenso poco feliz en el alejado aeródromo Puerto Raúl Marín Balmaceda. Se agradece, eso sí, que el corresponsal consignara la matrícula de la aeronave malograda y, por supuesto, la foto de rigor. Tras el impacto, el bimotor se arrastró por varios metros y quedó fuera de la pista de adocreto, sufriendo los daños habituales en este tipo de incidentes.
Haciendo una somera revisión en el sistema de información por internet que ofrece el sitio web de la DGAC, podemos ver que el último movimiento de este avión -el día 28 de diciembre- lo sitúa en un vuelo entre el aerodromo Manuel Marchant Binder de Puerto Montt y el destino mencionado. Los detalles del vuelo no son totalmente claros, pero lo más probable es que haya estado en el trance de ir a buscar pasajeros o de vuelta a la pista menor.
El crédito por la pesquisa de esta noticia corresponde a los ágiles colegas de www.modocharlie.com

Siguen los ataques a helicópteros en el sur

Cocteles molotov para helos españoles
AgustaWestland AW119Ke, EC-LRD, dañado por el fuego

Un nuevo atentado incendiario se registró la madrugada de este martes 31 de diciembre en la región de la Araucanía, pese a las medidas preventivas aplicadas por las autoridades gubernamentales, las que incluyeron el aumento de la dotación de medios humanos y aéreos de Carabineros.
(Imagen, LaTerceraTV)
El hecho se registró en la base de helicópteros Itraque, de la forestal Gerardo Cerda, que presta servicios para MININCO, ubicada en el kilometro 8 de la ruta 180, que une Angol con Renaico, en la provincia de Malleco. Al lugar llegaron cuatro encapuchados armados que sorprendieron a los carabineros que custodiaban estas aeronaves privadas como medida preventiva en lugares críticos y en fechas potencialmente complicadas. Lo primero que ocurrió fue el ataque a uno de los policías, cuya reducción permitió a los chicos malos arrojar una o más bombas molotov contra el aparato que este funcionario custodiaba (el EC-LRD, resultando muy destruido). El otro helicóptero en el lugar (una nave similar, de matrícula EC-LRC) no sufrió daño alguno, pues los atacantes huyeron cuando el policía que lo custodiaba reaccionó con disparos de balines de goma en la defensa de su colega caído. Las dos aeronaves estaban operando para CONAF a través de FAASA Chile Servicios Aéreos Ltda.

Los daños por babor del AW119Ke muestran la magnitud de las pérdidas (imagen, LaNacion.cl)
Detalle de los daños en el EC-LRD (Imagen, TV Angol)
Parece ser que el fin de año estimula los instintos neronianos de algunas personas en Chile. Sólo en lo que se refiere a incendio de aeronaves, recordemos que el 30 de diciembre de 2011 resultó quemado otro helicóptero en la zona de la Araucanía. En esa fecha, el Eurocopter AS.350B3 Ecureuil de INAER, registro CC-CIX y que prestaba servicios para CONAF, resultó totalmente destruido a unos 15 kilómetros de Victoria, mientras estaba estacionado en una base antiincendios eventual en el fundo Colo.
 
 CC-CIX en 2011: sólo quedó la cola

29 diciembre 2013

Nuevo ataque en la Araucanía

Helicóptero recibe balazos en la Araucanía
 
Bell 407 matrícula española EC-LBS (53864), protagonista de los hechos del 28 de diciembre, siendo periciado por Carabineros. El helicóptero pertenece a la flota de la ibérica INAER y se encuentra entregado en arriendo a CONAF por la temporada estival (foto, Mario Grandón)
De acuerdo a lo informado por la prensa local de Temuco, una bala calibre 9 milímetros sería el proyectil que impactó ayer a un helicóptero piloteado por Juan Peñuelas, cuando combatía un incendio forestal en el sector Chiquitoy, al interior de Ercilla, en la provincia de Malleco.

La aeronave se encontraba rellenando el contenedor de agua con la que combaten el fuego en una laguna que se ubica en las inmediaciones de la comunidad mapuche de Temucuicui, cuando recibió los impactos de bala.

El proyectil ingresó en el fuselaje debajo del asiento del copiloto y siguió trayectoria hacia atrás, vale decir hacia posiciones donde eventualmente van otros pasajeros. Afortunadamente el piloto viajaba solo.

Tras recibir el disparo la aeronave se dirigió a la base ubicada en el sector La Granja, 8 kilómetros al norte de Collipulli, donde aterrizó siendo allí mismo periciado por el Labocar de Carabineros.

No se trata del primer ataque de ese tipo en la región; ya en marzo, tres brigadistas resultaron heridos cuando un helicoptero, que también combatía un incendio, en el sector Libertad Campesina ruta 49 Collipulli–Pemehue, fue atacado recibiendo más de cien proyectiles de escopeta y uno de bala de 9 milímetros.
C-52 de Carabineros arribando a su nueva zona de operaciones, en el sur del país (foto, Mario Quilodrán, El Mercurio)
En el mismo sentido, y luego de que el Gobierno central manifestara su molestia a Carabineros por dos recientes atentados incendiarios en la zona, y atribuidos a una organización indigenista, la policia uniformada informó que trasladó a la región un refuerzo aéreo cuyos elementos más relevantes serían un helicóptero y el bimotor Raytheon King Air B200GT matrícula C-52 de esa institución. Cabe preguntarse en qué forma esta medida adoptada por Carabineros afecta el desempeño del plan antidrogas Frontera Norte, en el que dicha aeronave jugaba un rol principal.

Lamentable accidente

Se estrella Cessna de Club Universitario de Aviación
Foto, Sergio Collao
 
Cuatro fallecidos se registraron en la noche de ayer en un lamentable accidente de aviación. El hecho afectó al avión Cessna 182A número de serie 34038, una aeronave fabricada en 1957. El aparato se estrelló cerca de las 20.30 horas en las cercanías del aeródromo La Victoria de Chacabuco, mientras volaba con el registro CC-KUJ del Club Universitario de Aviación. De acuerdo a los testigos, el avión habría experimentado una falla catastrófica a poco de despegar, cayendo en llamas. El piloto al mando era Juan Carlos Cornejo Andrade (53), y los pasajeros fueron identificados como los hermanos Francisca (16) y Sebastián Solís Silva (19), y Jaime Farías Bizama (19).

Este monomotor cuadriplaza de ala alta llegó a Chile para operar con el Club Aéreo de Melipilla, luego de que el 27 de marzo de 1957 se celebrara el contrato de compraventa entre dicho club y la casa Cessna. Su primer registro fue entonces el CC-KMG (0481), que le fue asignado a contar del 19 de septiembre del mismo año.
Volcamiento del 6 de junio de 1967 (imagen, DGAC; col. I.S.)
En enero de 1961 el club melipillano lo entregó en venta al Club Aéreo de Calama, asumiendo el registro CC-NEA a contar del 21 de febrero siguiente. Mientras fue operado por esta corporación de aviación deportiva, el avión tuvo un interesante accidente. El 4 de junio de 1967 hacía un vuelo Calama–Antofagasta–El Salvador–Santiago. Por habérsele agotado el combustible en pleno vuelo y bajo un mal clima, debió hacer un descenso forzoso en Pampa Limón Verde, Calama. El piloto (Humberto Savini Romo) luego se dirigió a pie al pueblo para conseguir la ayuda de alguno de los socios del club aéreo. Luego de dos días de estar en Calama, el 6 de junio el piloto volvió al avión con la intención de despegar desde el mismo lugar donde había aterrizado. Lamentablemente, el terreno blando, la ausencia total de viento y una muy mala carrera de despegue hicieron que el hasta ese momento intacto aeroplano capotara totalmente, resultando con varios daños. A esta fecha el avión acumulaba unas 3.800 horas de vuelo. El piloto salió ileso.

El 28 de marzo de 1968 cambió su matrícula a CC-KFI, luego de que el club de Calama lo entregara en venta al Club Aéreo de San Felipe. Mientras voló con esta matrícula, y siendo pilotado por Atenas Jacques Pino, el 19 de septiembre de 1968 tuvo un aterrizaje de emergencia en un potrero al norte del aeródromo Pichoy, por haberse quedado sin combustible. Afortunadamente no hubo daños ni lesiones que lamentar.
Ya como CC-KUJ, en 2006 (foto, I.S.)
Veinte años después, el 25 de marzo de 1988, el Cessna pasó a registrarse como CC-PHD, por haber sido vendido a Luis Gardeweg Baltra. Su último propietario fue el Club Universitario de Aviación, el que lo adquirió de Gardeweg el 16 de septiembre de 1991. Asumió así su última matrícula, la CC-KUJ, el 25 de septiembre siguiente.

21 diciembre 2013

Cecil Grace, aniversario de su trágica muerte

Grace: Un pionero chileno de 1910
 
Esta interesante imagen, a mi juicio la mejor de todas las que se conocen de Grace, también parece ser inédita en Chile. Aparece en la biografía del aviador en uno de los volúmenes de la Enciclopedia Aeronáutica Garriga. Justo es decir que esa biografía no menciona para nada que Grace haya sido chileno.
Este 22 de diciembre se cumplen 103 años del fallecimiento del aviador Cecil Stanley Grace. Muy poco se ha escrito acerca de la vida y obra de este pionero de la aviación y el motivo por el cual intentamos estos breves comentarios en El Observador Aeronáutico es porque este señor habría sido, efectivamente, chileno.
En efecto, un historiador aeronáutico de nota -Enrique Flores Álvarez- sostuvo que Grace habría nacido en Viña del Mar en 1886, hijo de un comerciante británico de nombre John W. Grace avencidado en nuestro país.

En 1893 el joven Cecil habría sido enviado por su padre a la Rubia Albión para educarse. Estando en Inglaterra, el 12 de abril de 1910 Cecil dio las pruebas para obtener el título de piloto civil en el club aéreo ubicado en Eastchurch, isla Sheppey. Habiendo obtenido sus alas luego de la instrucción, el joven Cecil habría sido el cuarto aviador titulado en Inglaterra.

En internet es posible bucear para encontrar algunas pistas acerca de su interesante vida en Europa. Por lo mismo, y como es nuestra costumbre, no abundaremos mayormente en aquello, más allá de lo que creamos interesante de consignar acá.
Recorte del The New York Times de 1 de mayo de 1910
A pesar de lo dicho por Flores, es del todo necesario darse una vuelta por el archivo histórico del Registro Civil de la Quinta Región –Valparaíso y Viña del Mar- para chequear las circunstancias o datos duros de la partida de nacimiento de este connotado aviador, si es que existen. En Chile, que sepamos, jamás ha aparecido nada abordando concretamente el punto. Mediante este documento y su debida publicación en la red quedaría en claro la nacionalidad del sujeto. Lo digo porque en ninguna publicación seria extranjera aparece reconocido el hecho de la nacionalidad chilena de este aviador.

El punto no me parece menor. Aparte del desconocimiento de la circunstancia más allá de nuestras fronteras, Grace habría sido el tercer chileno en obtener la licencia de piloto. Los primeros aviadores connacionales, ya se sabe, fueron los amigos Emilio Edwards Bello y José Luis Sánchez Besa, quienes a fines de 1908 ingresaron con distinta suerte a la escuela de aviación de Mourmelon le Grand, en Reims, Francia. Grace se encontraría, entonces, en los listados entre estos dos aristócratas y el francés avecindado en Chile César Copetta Brossio, quien fue el primer hombre en volar un avión en Chile, el 21 de agosto de 1910, luego de obtener su brevet en Francia en el primer semestre del mismo año.
Cecil Grace en un biplano Short S.29 en Swingate, el día de su muerte
Aparte del hecho de haber protagonizado un atrevido vuelo en la vertical de la flota de guerra de la Royal Navy, nuestro hombre falleció el 22 de diciembre de 1910 mientras intentaba cruzar el Canal de La Mancha desde Dover hacia Francia, para ganar un premio en libras asignado al triunfador. Las circunstancias de estos vuelos y del accidente de Grace fueron bien cubiertas por revistas de la época, en especial la Flight británica, que también es posible de encontrar en la red. Sus probables restos habrían sido encontrados en una playa el 14 de marzo de 1911. Estas circunstancias hacen que Grace haya sido el primer aviador civil chileno en fallecer en un accidente de aviación, antes incluso que el propio Luis Alberto Acevedo, que se estrelló en Concepción el 13 de abril de 1913, a un año de haberse titulado de piloto.

Un brindis por la memoria de Cecil Grace, entonces.

20 diciembre 2013

Incidente afectó a avión de Aerolíneas ATA

King Air aterriza sin tren en Viña del Mar
Foto, @bomba_lacruz
Un aterrizaje forzoso debió realizar a las 21.30 horas de anoche un avión de Aerolíneas ATA (Aero Transportes Araucanía Ltda.) en las inmediaciones de la pista de Concón, debido a desperfectos mecánicos que presentó mientras volaba hacia Santiago.

El hecho afectó al bimotor Beechcraft 65-B90 matrícula CC-CVZ (número de serie LJ-441), que llevaba a bordo a sus dos tripulantes, los que habrían resultado con lesiones leves.

El avión provenía originalmente del archipiélago Juan Fernández y, tras despegar de Viña del Mar, donde descendieron pasajeros, enrumbó hacia Santiago. Sin embargo, en pleno vuelo la tripulación se percató de algunas anomalías que obligaron a desviar el rumbo y regresar de urgencia a la base aeronaval costera.

Esta aeronave tiene una interesante historia documental. Su primer dueño en Chile fue la CORFO, la que lo adquirió de la Beech Aircraft Co. el 1 de febrero de 1969 "para hacer transporte ejecutivo desde Tobalaba". Su primera matrícula fue la CC-ECF, inscrita el 11 de marzo de ese mismo año. En 1982 fue transferido de hecho al Ejército (junto con el Beechcraft Model 58 Baron), institución que lo operó desde Tobalaba con el número de orden 209. No obstante, la inscripción civil se canceló recién el 6 de febrero de 1987, por causa de haber sido donada al Fisco/Ejército por resolución 9 de junio de 1982 del Ministerio de Bienes Nacionales. En manos militares voló formalmente hasta la resolución de baja dictada por la Dirección de Logística fechada el 23 de agosto de 1995. Esta orden anotó incorrectamente el número de serie como "LJ442"; muy probablemente fue un inadverido error de digitación del decreto.

El King Air cuando operó para el Ejército, como 209 (imagen, Claudio Cáceres Godoy)

ERROR LLAMA A ERROR

Luego, por contrato de compraventa de 3 de enero de 1997, el Fisco/Ejército de Chile vendió este avión a Turismo Aéreo Chile Ltda. En ese documento se identificó al avión como "E-209" y se le reconoció correctamente el c/n LJ-441. La autorización para vender este avión provino del Ministerio de Defensa vía decreto de 18 de abril de 1996, el que, basándose en la orden de baja, identificó erróneamente al avión como "LJ442". Vista la discrepancia de identificación contrato–decreto, la DGAC rechazó correctamente la inscripción del nuevo dominio en el Registro de Aeronaves.

Para salvar el problema, el Ejército decidió la alternativa más corta y menos complicada, pero equivocada: en vez de rehacer todo el complicado proceso de decretos, se decidió modificar el contrato original mediante un documento de 28 de enero de 1997, rectificándose la correcta identificación que tenía la cláusula primera del contrato de venta, y plegándose malamente a lo señalado por el equivocado decreto de Defensa, cambiando sin base ni fundamento (más que el mero error administrativo) la identificación del avión al c/n "LJ442". Con este nuevo antecedente, el 4 de febrero de 1997 la compradora pudo finalmente inscribir su dominio, destrabándose el negocio. Así, la matrícula asignada fue CC-PBZ, y la DGAC se sumó al error (precisamente, en el Libro 13, fojas 154, y a pesar de la historia anterior del avión, debidamente registrada en los mismos libros del Registro de Aeronaves).

Curiosamente, la placa identificatoria de fábrica de esta aeronave, cuya revisión habría zanjado toda discrepancia, dejó de estar fisicamente en el avión en fecha indeterminada.

Es así como durante un tiempo, porque el error fue subsanado años después, hubo dos Beechcraft "LJ-442" volando en el mundo, siendo el nuestro el "fake". Hoy, sin embargo, el avión figura correctamente identificado con su c/n real, el LJ-441.

17 diciembre 2013

Hemos publicado, XLVIII

Nuevo libro de la Academia de Guerra Aérea
Ya fue publicado el nuevo libro de la Academia de Guerra Aérea de la FACh y su lanzamiento será esta semana en dicho instituto.
Este año me correspondió continuar la serie de Campañas Aéreas, la que en 2011 abordó las operaciones aéreas de las guerras de Corea y Vietnam y en 2012 aquellas propias del conflicto de las islas Falkland, ambos también de mi autoría.
El trabajo de 2013 dice relación con los aspectos más relevantes de lo ocurrido entre 1991-1999 a propósito de la desintegración de Yugoslavia y los distintos tipos de intervención política y militar internacional dadas en los conflictos de Eslovenia, Croacia, Bosnia-Herzegovina y Kosovo.
El nuevo libro tiene 220 páginas y estará disponible a contar de la segunda quincena de enero próximo.